¿Sabes qué es el Blockchain y por qué es el futuro de la información?
Imagina que estas en un restaurant con 10 mesas, de las cuales, 8 están ocupadas con una persona por mesa, incluyéndote a ti. De pronto, hace ingreso el dueño del restaurant con un maletín en la mano, argumentando que dentro del maletín hay 100 millones de pesos y que tiene pensado entregar parte o la totalidad de ese dinero a los presentes. Probablemente muchos de los comensales no creerán su historia, después de todo, no cualquiera carga 100 millones por la calle así como así.
Sin embargo, el dueño del restaurant, inteligentemente pasa mesa por mesa mostrando el interior del maletín y preguntando ¿Me crees ahora?, a lo que obviamente cada uno de los presentes acepta creer el argumento del dinero en el maletín, pidiendo sellar el acuerdo, haciendo firmar un documento en donde cada comensal declara creer lo que el dueño del restaurant asegura, para luego entregar una copia de ese documento firmado a cada uno de los presentes. Al cabo de unos minutos, claramente el 100% de los presentes está de acuerdo en que el dueño del maletín carga con 100 millones de pesos.
Luego de un momento, entra un nuevo comensal al restaurant e inmediatamente el dueño lo invita a participar de la actividad, comentándole “Cada uno de los presentes, ha firmado un documento declarando que verifican que en este maletín, cargo 100 millones de pesos y que pretendo repartirlos entre los participantes, si crees en todos ellos y firmas tu también el documento, puedes participar”. El nuevo comensal, como era de esperar, acepta el trato, creyendo en la palabra de cada uno de los asistentes, sin siquiera conocerlos, pues es la palabra de la mayoría (o la totalidad en este caso). Sin duda, sin este documento firmado por todos no habría creído la historia. Luego de unos minutos, el dueño promete que al final de la actividad, le entregará 10 millones de pesos a uno de los asistentes (digamos… a ti) y 5 millones al que está a tu izquierda, agregando una línea a su copia del documento, indicando el nombre de los destinatarios de ese dinero, para luego hacerla firmar por todos los presentes nuevamente, evidenciando que están todos de acuerdo de a quién y cuánto dinero se entrega y dejándoles una nueva copia del documento con la información anterior y la nueva.
Sin embargo, un transeúnte que observaba esta extraña actividad desde la vereda a través de la mampara del restaurant, decide entrar antes de que termine, ocupando la décima mesa disponible, para luego pasar mesa por mesa diciendo que él también es beneficiario de 5 millones de pesos y que el dueño le había prometido ese monto con anterioridad. Al final de la actividad, justo antes que el dueño del restaurant reparta el dinero, el último comensal se levanta para reclamar su monto argumentando que todos los demás asistentes son testigos, pues previamente pasó mesa por mesa diciendo que a él le habían prometido 5 millones. No obstante, el dueño inmediatamente extrae el documento firmado por todos, en donde se muestra explícitamente que el beneficiario del dinero sólo son tú y la persona de la mesa a tu lado… Todos los presentes tienen una copia exacta de ese documento y verifican que está mintiendo, por lo que el prominente estafador es expulsado del restaurant, logrando que la transacción sólo llegue a quienes se había prometido llegaría.
Pues bien, esta extraña historia (ficticia sin duda), es una analogía de cómo funciona la tecnología Blockchain.
El blockchain es una tecnología de la información, construida para trabajar de manera descentralizada, lo que quiere decir que cada uno de los participantes es dueño de la misma información que todos los demás poseen, con lo cual es posible confiar plenamente en ella, pues todos están de acuerdo en que es verídica. Esto sin la necesidad de un ente único que controle esa información y la extienda a sus dependientes.
Volviendo a la analogía del restaurant, cada comensal se conoce como “Nodo”, el cual es un servidor (Digamos, un computador especial o incluso un computador de escritorio) el cual almacena la información a la vez que contiene el software, cooperando al funcionamiento del sistema. El dueño del restaurant es el software propiamente tal (Quien procesa las nuevas informaciones y controla el proceso), y el bendito documento firmado o cada nuevo documento firmado, es un nuevo bloque que se almacena dentro de la base de datos de cada uno de los nodos.
Cada vez que se genera una nueva información, la cual puede ser un solo nuevo mandato o muchos mandatos o transacciones, el software almacena esas peticiones de transacción en un periodo de tiempo (10 minutos para el caso del Bitcoin, por ejemplo), para luego enviar a procesar ese paquete a todos los nodos a través de un complejo problema matemático o proceso conocido como “Proof of work” o “Prueba de trabajo”. El primer nodo que logre resolver esa prueba de trabajo, es el creador del nuevo bloque o “Hash”, repartiendo luego ese nuevo bloque (Que contiene todas las transacciones válidas) a todos los demás nodos para que éstos lo almacenen en su base de datos y así, todos los participantes tengan siempre la misma información.
Esta tecnología que en esencia parece simple, representa toda una revolución, pues por un lado; está basada en un concepto humano que ha sido básico para su evolución: la confianza en la mayoría. Por otro lado y por primera vez en nuestra historia, permite democratizar todo tipo de conceptos, haciendo que cierto tipo de bien o información, este bajo control y en poder de cada individuo, haciendo obsoleto el control por parte de un organismo centralizado. Y por último y mas importante, es una tecnología o concepto altamente confiable y segura, dado que para manipular o cambiar la información o transacciones almacenadas en la base de datos o bloques, es necesario que un tercero cambie la información o «convenza» a la mayoría de los participantes, cuestión que es mas difícil a medida que existan mas individuos o nodos participando del proceso.
Esta revolucionaria tecnología, es el pilar de los desarrollos actuales y posteriores de Welten Fintech, pues creemos firmemente en la cuarta revolución: La era en que por primera vez, no sólo cambia la forma en que los humanos hacen las cosas, sino que además, cambia lo que somos.
¿Quieres ser parte de la revolución? ¿Te interesa desarrollar proyectos relacionados con las tecnologías financieras disruptivas? Tomemos un café y hablemos de tus ideas.
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